La Ley Antifraude 11/2021, en vigor desde julio de 2021, refuerza el control de la Agencia Tributaria para prevenir prácticas de evasión fiscal y garantizar la transparencia en la actividad económica.
Uno de los puntos más relevantes para autónomos y empresas está en los sistemas de facturación y contabilidad, que deben cumplir con requisitos muy claros para evitar sanciones.
¿Qué exige la Ley Antifraude en materia de facturación?
La norma prohíbe expresamente el uso de programas que permitan:
Llevar una doble contabilidad o generar versiones paralelas de los libros.
Alterar, manipular o borrar facturas y registros una vez emitidos.
Ocultar operaciones mediante funciones que distorsionen los datos.
En resumen, cualquier sistema que pueda falsear la información contable o fiscal queda prohibido. La simple tenencia de este tipo de software ya puede ser sancionada, aunque no se utilice con fines fraudulentos.
Características que debe cumplir un programa de facturación
Para estar en línea con la Ley Antifraude, los sistemas de gestión deben garantizar:
Integridad: los datos no pueden ser modificados sin dejar rastro.
Conservación: las facturas deben almacenarse durante el periodo legal obligatorio.
Trazabilidad: cada operación debe poder seguirse y auditarse.
Inalterabilidad: una vez generada la factura, no se puede eliminar ni sobrescribir.
Estos principios son la clave para evitar problemas en una inspección y demostrar que la contabilidad refleja fielmente la actividad real.
VeriFactu: sistema derivado de la Ley Antifraude
Del marco legal de la Ley 11/2021 surge el sistema VeriFactu, desarrollado reglamentariamente como una herramienta clave para garantizar el cumplimiento.
Es un sistema diseñado para combatir el fraude fiscal mediante la trazabilidad y autenticidad de las facturas. Permite enviar de forma automática los registros de facturación a la Agencia Tributaria, asegurando que no puedan ser alterados.
¿Por qué se relaciona con la Ley Antifraude?
Porque la Ley 11/2021 estableció la obligación de contar con programas de facturación que aseguren integridad e inalterabilidad, y VeriFactu nace como desarrollo práctico de esa exigencia.
Así, VeriFactu se convierte en la pieza tecnológica que conecta a las empresas con Hacienda, ofreciendo mayor seguridad y transparencia en el proceso de facturación.
Otras obligaciones relevantes de la Ley Antifraude
Aunque el punto del software es central, no hay que olvidar otras medidas de la ley:
Límite de pagos en efectivo: 1.000 € en operaciones entre empresarios y 2.500 € entre particulares.
Declaración de criptomonedas y activos en el extranjero.
Refuerzo de sanciones en caso de incumplimiento.
Buenas prácticas para cumplir con la Ley Antifraude
Revisar el software actual y asegurarse de que cumple con los requisitos legales.
Actualizar los procesos internos de facturación y cobro, evitando el uso de efectivo más allá de los límites.
Trabajar con asesores fiscales que aseguren un correcto cumplimiento normativo.
Formar al equipo en buenas prácticas contables y fiscales.
La tranquilidad de facturar sin riesgos
En Distrito K, ofrecemos un programa de gestión adaptado a la Ley Antifraude y compatible con VeriFactu, que garantiza la integridad, trazabilidad e inalterabilidad de tus facturas y registros contables.
Con nuestra solución, puedes trabajar con la tranquilidad de saber que cumples con la normativa vigente y evitas riesgos de sanciones por el uso de software inadecuado.
Si quieres más información o una demo personalizada, ponte en contacto con nosotros y te asesoraremos sin compromiso.
