Cuando contacta con uno de nuestros asesores comerciales enseguida notará que se interesan por la peculiaridades de su actividad. Es síntoma de lo importante que resulta planificar la implementación de un software ERP. Se trata de programas de gestión destinados a integrarse en cada fase y en cada proceso de su empresa. Su objetivo es ayudar a mejorar su rendimiento por lo que es crucial evitar los siguientes condicionantes:
- No todos participan
Conocer el funcionamiento de su empresa pasa por llegar a quienes la conocen mejor. Sus directivos deben ayudar a entender su naturaleza, apuntar puntos críticos que pueden ser relevantes. Por eso se debe dedicar tiempo a analizar necesidades técnicas, formación del personal, objetivos de la incorporación del software de gestión y condicionantes específicos de la actividad de su empresa.
- Cada caso es único
Puede que un amigo o colega les recomiende un software de gestión pero eso no significa que sea necesario implementarla de manera similar. Cada empresa es un caso a estudiar y un programa de gestión a medida posibilita adaptar la herramienta al medio y no al revés.
- Un inversión excesiva o insuficiente
En Distrito K nos esforzamos por garantizar la confianza de nuestros clientes. Por eso no prometemos lo que no podemos cumplir y no ofrecemos lo que no necesita. La relaciones a largo plazo nos resultan más satisfactorias y es por eso que analizamos cada caso con el fin de presupuestar una solución ajustada a sus necesidades reales, ni más ni menos, con el fin de ofrecer un programa de gestión que realmente le sirva para mejorar. Por otro lado garantizamos que una inversión le retorna con creces ya que responderá a lo que su actividad realmente necesita para crecer.
- Atrapados y sin espacio para crecer
A veces pensamos demasiado en el presente de nuestra empresa. Nos damos cuenta de la urgencia de tener un software de gestión que nos ayude a seguir adelante y suele ser la causa de decidirnos por hacer las cosas rápido en lugar de bien y en estos casos, solemos optar por programas de gestión con poco potencial. Es algo que nos perjudicará en un futuro cuando nos demos cuenta que necesitamos evolucionar y adaptar nuevos procesos a una herramienta cerrada a tareas básicas y genéricas.
- Reticencia al cambio
Si apostamos por mejoras tecnológicas tan asociadas a las tareas esenciales de nuestros empleados solemos caer en el error de actuar de manera recelosa y reticente y a obstaculizar la implementación correcta de un software ERP que en ningún momento amenaza con alterar negativamente el funcionamiento de la empresa sino que puede ayudar a adaptarlo a un nivel más alto de orden y eficiencia.
- Falsas expectativas
La tecnología ha avanzado cada vez más rápido en los últimos años. El crecimiento de la cultura tecnológica lleva un ritmo exponencial imparable. Cada vez nos hacemos más tecnológicos, más rápido. Pero la sensación del ciudadano es cada vez más vertiginosa de lo que realmente es, creándose falsas esperanzas sobre el proceso de puesta en marcha de herramientas tecnológicas. Esto quiere decir, simplemente, que muchas veces nos creemos que las soluciones tecnológicas lo pueden todo y que están más automatizadas y no necesitan de nuestra implicación. Obviamos el papel del factor humano y nos parece que todo el proceso nos excluye y debería funcionar sin nuestra influencia.
- Formación insuficiente
La mayor parte de las empresas no dispone de un equipo dedicado y formado en software ERP y programas de gestión. Creemos que un profesional con aptitudes relacionadas genéricas puede hacerse con su funcionamiento al máximo de su potencial. Por otra parte el programa de gestión será utilizado por la mayor parte de la plantilla cuyo background no tiene porqué incluir este tipo de conocimientos. La formación es indispensable para lograr explotar todas las posibilidades de esta nueva incorporación.
- Demasiada dependencia
La formación es uno de los pasos fundamentales. En Distrito K afrontamos este servicio ajustando los conocimientos a las características de cada empresa. Intentamos hacer que nuestros clientes sean hábiles y comprendan y usen al máximo las funcionalidades de nuestro software de gestión mientras intentamos garantizar la mayor independencia posible llegado el momento.
