Cuando hablamos de un software ERP o programas de gestión modular nos referimos a aquellos capaces de configurarse mediante una serie de módulos, cada uno destinado a cubrir una faceta determinada y que podremos contratar o descartar según nos resulten o no útiles.
En Distrito K, desde la primera llamada, nuestro equipo comercial se dedica a analizar cada caso, buscando la mejor combinación de módulos y funcionalidades posible. Se estudian las necesidades y los módulos que serán capaces de cubrirlas y se determinará qué departamentos van a hacer uso del programa de gestión. Esto ya supone una ventaja en cuanto a la optimización de la inversión inicial. Sin embargo, también es una mejora en cuanto a los costes futuros, ya que un programa de gestión modular permite siempre aumentar su capacidad mediante el añadido de nuevos módulos, según las necesidades o cambios que se produzcan.
Los módulos nos permiten determinar fronteras entre departamentos, organizando y focalizando cada uno de ellos basándonos en sus responsabilidades. Esto también proporciona protección de datos sensibles a los que podemos vetar acceso según nos interese, definiendo permisos de usuario.
Otro factor interesante se encuentra en la continua mejora mediante actualizaciones, algo que otros programas de gestión más limitados no ofrecen con regularidad y que en tiempos de constante cambio en normativas y procesos, es una ventaja nada desdeñable.
Como añadido, podemos destacar que cuando hablamos de un tipo de software de gestión, como es el modular, nos encontraremos con empresas experimentadas, con años de desarrollo y capaces de ofrecer servicios de atención y asistencia técnica inmediatos y profesionales.
En definitiva, si tenemos que optar por un programa de gestión, la opción inteligente siempre es invertir en empresas que ofrezcan un software escalable y profesional, capaz de abordar y ajustarse a nuestras necesidades presentes y futuras.