La palabra SEPA deriva de las siglas en inglés Single Euro Payments Area, que engloba la zona en que los ciudadanos y empresas pueden realizar cobros y pagos en euros, dentro y fuera de las fronteras estatales y que además asegura los mismo derechos y obligaciones independientemente del estado en que se tramiten, de acuerdo con la Directiva Comunitaria de Servicios de Pagos.
Esta legislación nace fruto del empeño del sector bancario por la unificación y respaldado por el Banco Central Europeo y la Comisión Europea, representando una integración y unidad de la unión europea y posibilitando, al igual que actualmente ya podemos cobrar y pagar con billetes y monedas de euro, también podamos realizar transferencias y presentar recibos con la misma facilidad, seguridad y eficiencia.
Sus principales ventajas son:
- Seguridad y prontitud en los pagos y transferencias
- Eliminación de barreras en pagos internacionales entre los países adheridos
- Utilización de una única cuenta bancaria, para operaciones de pago en euros dentro de la zona SEPA
- Mejoras de eficiencia en los procesos de ejecución de pagos, que permitirán innovaciones en el ámbito de los medios de pago
Los instrumentos de pago incluidos en la SEPA son:
- Transferencias
- Adeudos directos
- Pagos con tarjeta
Esta zona única engloba 34 estados, de los cuales 28 son miembros de la Unión Europea.
EEA 17 países UE euro
- Alemania
- Austria
- Bélgica
- Chipre
- Estonia
- Finlandia
- Francia
- Grecia
- Irlanda
- Italia
- Luxemburgo
- Malta
- Holanda
- Portugal
- Eslovenia
- Eslovaquia
- España
EEA 3 países no UE
- Islandia
- Liechtenstein
- Noruega
EEA 11 países NO euro
- Bulgaria
- República Checa
- Dinamarca
- Hungría
- Letonia
- Lituania
- Polonia
- Rumania
- Suecia
- Reino Unido
- Croacia
EEA 3 países no EEA
- Andorra
- Mónaco
- Suiza
- San Marino
- Vaticano
